Menuda tiene montada Fletcher de cara al lanzamiento de su nuevo álbum, Would You Still Love Me If You Really Knew Me? (¿Me querrías aún si realmente me conocieras?). Bien, para poder contaros la historia, hagamos un breve resumen:
- Fletcher es cantante.
- Este disco será el tercero de su carrera.
- Fletcher se identifica como queer.
- Su nuevo single se titula Boy. El título del disco, que os puse antes, es también relevante.
Bien, sabiendo toda esta historia, vamos allá con el drama: Fletcher ha anunciado el disco con un single, Boy, en el que se lamenta de haberse enamorado de un chico y, en esencia, explica la situación a sus fans en una canción cuyo estribillo dice “seguro que no es lo que querías escuchar”. Y tan seguro que no: las fans de Fletcher han montado en pie de guerra porque este giro hacia una relación hetero-aparente ha ocurrido, para más inri, en pleno mes del Orgullo.
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Pero ¿cuál es el problema, si Fletcher nunca se ha identificado como lesbiana, sino como queer? Pues que toda su carrera la ha basado en el appeal lésbico. Aunque no haya cerrado puertas a los hombres, sus canciones hablaban abiertamente sobre mujeres (tiene temas como Sharon’s So Hot, Girls Girls Girls o All Love que no dejan mucho abierto a la ambigüedad) e históricamente ha jugado mucho con el lesbian-baiting. Incluso su relación con la youtuber Shannon Beveridge fue tremendamente pública.
Y de pronto, su nuevo single se titula Boy, tiene el mismo tono triste de cuando Pablo Alborán confesó que era gay —pero a la inversa—, su nuevo disco lleva por título algo que deja ver “este es mi verdadero yo” y para colmo de males, todo llega con un sonido que también se diferencia mucho de su proyecto anterior.
Claro, imagínate ser una fan de Fletcher, seguirla y sentirte representada con mil historias a lo largo de su carrera y que de pronto, se reconvierta en una cantante de country-folk que vende camisetas con la palabra “chico” en su página web y centra su mensaje en ser la víctima de tu incomprensión. ¿¡Cómo no vas a aceptar que la señora que lleva años hablándote de pop sáfico, que es de los pocos referentes sin male-gaze de la homosexualidad femenina y que tiene un single llamado “Sharon está buenísima” esté ahora enamorada de un señor y haciendo country?! Mala, mala y mala.
Veremos en qué queda todo esto para ella: por ahora Boy supera por los pelos el millón de escuchas en Spotify (está funcionando notablemente peor que Eras Of Us, el lead de su anterior álbum) y no es siquiera el tema más popular de su perfil en estos momentos. Lo es Bitter, un tema de 2019 que supera los 191 millones de reproducciones.
