Maluma y Sech se escapan de sus casa en mitad de la noche para tener una aventura sin que sus parejas se enteren. Y normal que se escapen en ‘Instinto Natural’, porque vamos a ver, ¿quién va a estar cómodo en su cama si tiene que dormir de pie? Si lo habéis visto, Maluma sale del colchón totalmente de pie, con lo que la pobre muchacha que está a su lado tiene que tener los riñones molidos. Francamente, esa no es manera de descansar. En dos meses, Pikolín está en la más absoluta ruina.
El caso es que los dos artistas escapan y quedan con otras muchachas para ser infieles, aunque aseguran que no meten el amor entre medias. Lo típico de tener una pareja abierta sin que una de las dos mitades lo sepa, qué poco tacto. De modo que normal que la cosa se vaya complicando según Maluma y Sech avanzan en el teatral clip. Que por cierto, kudos al equipo que se haya encargado del montaje, porque la transición entre escenas ha quedado más que estupenda. Un teatro que poco tiene que envidiar a vídeos como el ‘These Days’ de Take That o aquellas escenas de balcón que María Teresa Campos se montaba con Rocíito y Paco Valladares.
Pero la infidelidad termina pagándose en plan telenovela en ‘Instinto Natural’ y Maluma y Sech terminan frente a un jurado popular que podrían haber liderado Emma García y Toñi Moreno mano a mano (no vamos a elegir a una de las dos, que luego se nos echan encima). Eso sí, no necesitan la ayuda de una abogada soltera que luche por su cliente, lleve minifaldas provocativas y sea autosuficiente, porque se van de ahí de rositas para volver a la cama.
Maluma tiene luego cuernos y halo, porque malo será un rato, pero qué bueno está el jodío. ¿O no era así el funcionamiento de esto?