A estas alturas de lo que le queda de vida, nadie esperaba que de ‘Witness’ salieran más singles. Es verdad que Katy Perry llevaba algunos días compartiendo imágenes de lo que parecía la grabación de un vídeo, pero también es verdad que podía haber sido para su gira, para el anuncio de algún producto o cualquier otro objetivo.
Pero no, parece que el objetivo de ‘Hey Hey Hey’ es el de servir como cuarto single del disco, y de paso, tratar de arañar unas cuantas copias durante la Navidad para poder llegar al millón mundial, que se le resiste. Y es que ‘Witness’ ha sido un fracaso menor del que se anticipaba, aunque se haya dejado notar más por el pobre funcionamiento de sus singles, la mala prensa de la artista, etc. El disco lleva vendidas unas 850m unidades mundiales (bastante más, por ejemplo, que Miley Cyrus -250m- o Kesha -450m-), gracias en parte a que sus streams no han sido especialmente bajos y a que el disco se vendía con el ticket-bundle de una gira que sí parece estar yéndole bien. Con eso y con todo, la artista está nominada al Premio Amaro a Flop Del Año por ‘Witness’.
En cualquier caso, volvamos al vídeo de ‘Hey Hey Hey’, donde Katy Perry toma como referentes a dos grandes mujeres de la historia francesa: Mademoiselle L’Irrelevànce y Marlene Mourreau. Esta última esta se identifica claramente en el clip: es rubia, suele salir con señores mayores que viven entre lujos, se hace selfies y puede seguir viviendo, perfectamente, sin cabeza. La primera, sin embargo, es la última en salir en el clip, con la peluca morena: y es que hay algo que hemos ido perdiendo a través de la era ‘Witness’; para buscar una nueva Katy Perry, en los últimos dos vídeos hemos recurrido bastante la estética y funcionamiento de la anterior; no tanto en ‘Teenage Dream’, pero estos dos clips podrían haber sido parte de ‘Prism’ sin problema.