Ed Sheeran llevaba diez años trabajando en un álbum acústico. Que también te digo: un proyecto que Soraya ya llevó a cabo en cuestión de meses le lleva a Sheeran diez años. Y ahora pregunto: ¿dónde están los Brits que se le deben a Soraya? Pues eso.
Ed Sheeran llevaba diez años trabajando en un álbum acústico, ‘Subtract’’, y ha decidido tirarlo todo por la borda. El último signo matemático que le quedaba por trabajar (‘Subtract‘ es la manera de leer «–«) hablara de su depresión y sus problemas de ansiedad y su tracklist ha terminado substituyendo -que diría Belinda- al acústico original.
Sí que supondrá una vuelta de Ed Sheeran a un sonido más folk-pop, según parece, y el artista habla del álbum como el primero que no ha compuesto para que «le guste a la gente». Vamos, que es el primero que le va a gustar a Pitchfork, veréis.
‘Subtract‘ se ha presentado con una espantosa carátula amarilla muy de la tradición y el gusto de Sheeran por las portadas espanto, pero también con un trailer que anticipa que el álbum será visual, porque al pasear Ed Sheeran por la playa que muestra su tracklist, cada título que cruza se deja acompañar por imágenes de lo que parecen distintos vídeos. Claro que algo así hizo también Beyoncé y los vídeos resultaron el cariño de toda esta gente.
Veremos si ‘Subtract‘ es el ‘Folklore‘ o el ‘Midnights‘ de Ed Sheeran y si consigue remontar el bajón cualitativo de ‘Equals‘, su álbum más discutible hasta ahora si nos preguntáis. He aquí lo que el artista ha dicho de su nuevo trabajo, que ya dispone de multiformato pero no de un single que lo apoye:
«Llevaba una década trabajando en Subtract, intentando esculpir el álbum acústico perfecto, escribiendo y grabando cientos de canciones con una visión clara de lo que creía que debía ser. Entonces, a principios de 2022, una serie de acontecimientos cambiaron mi vida, mi salud mental y, en definitiva, mi forma de ver la música y el arte.
Escribir canciones es mi terapia. Me ayuda a dar sentido a mis sentimientos. Escribía sin pensar en cómo serían las canciones, simplemente escribía lo que me salía. Y en poco más de una semana sustituí una década de trabajo por mis pensamientos más oscuros.
En el espacio de un mes, a mi mujer embarazada le dijeron que tenía un tumor, sin posibilidad de tratamiento hasta después del parto. Mi mejor amigo, Jamal, un hermano para mí, murió repentinamente, y yo me vi ante un tribunal defendiendo mi integridad y mi carrera como compositor. Entré en una espiral de miedo, depresión y ansiedad. Sentía que me ahogaba, con la cabeza bajo la superficie, mirando hacia arriba pero sin poder salir a tomar aire.
Como artista, no creía que pudiera presentar al mundo un trabajo que no representara exactamente dónde estoy y cómo necesito expresarme en este momento de mi vida. Este álbum es puramente eso. Es abrir la trampilla de mi alma. Por primera vez, no estoy intentando crear un álbum que guste a la gente, simplemente estoy sacando algo que es honesto y fiel al punto en el que me encuentro en mi vida adulta.»
