A ver, vamos a explicarnos de modo que todo el mundo lo pueda entender: Drake no es un rapero revolucionario, de estos que coquetean con montón de sonidos, que experimentan y que son abrazados por la crítica a lo loco. No, Drake es un poco como el millennial Jay-Z: tira de sonidos clásicos, hace buenas canciones y consigue hits. Nada que objetar, no se vuelve loco y convence a un montón de gente sin acabar publicando material bochornoso a lo Flo Rida. Es una zona de confort que contenta a público y crítica, sin volver loquísima a esta última.
Pero Drake necesita parar, porque su ritmo de publicación y el fervor del público le está empezando a hacer caer en hits vacíos u oportunidades tremendamente desperdiciadas como su nuevo single. Y es normal, porque nadie aguanta un ritmo de trabajo de 6 singles y cuatro álbumes por pestañeo. Es inviable. Drake acaba de publicar ‘Nice For What’, una canción que, ya os avanzamos, será mínimo top3 en Billboard y un probable #1 en UK, porque es Drake y, igual que ocurre con Enrique Iglesias en España, este es su momento de gloria. Y que lo aproveche.
Pero ‘Nice For What’ es un despropósito. Increíble que una canción de apenas 3 minutos que samplea el ‘Ex-Factor’ de Lauryn Hill termine como un petardo fallido porque nadie se ha preocupado de cuidar su estructura. Es simplemente Drake rapeando sobre el loop de Hill, haciendo paradas insignificantes de por medio para adecuarse a la era del urban underground, y dejando escuchar un par de hooks lo suficiente como para que el proyecto cuele. Y colará, pero no por calidad, sino por momentum. Y porque su vídeo y mensaje feminista, cargado de famosas que lo apoyan en el clip, llega en el instante justo.
Drake necesita parar, dejar de publicar álbumes de 20 canciones -en los que la mitad sobra- cada 6 meses, y reflexionar un poco sobre su devenir. Más que nada porque sí, puede que de cuando en cuando alguno de sus hits merezca la pena realmente, que lo hace, pero es trágico tener que pasar por 140 que no entre medias, como este. Podría ser alguien que, además de vender millones de copias, fuera a ser recordado por haber dado grandes himnos. Tratad de recordar ‘God’s Place’ de aquí a 7 meses, y nos decís.
