‘Drag Race España’ está emitiendo su cuarta temporada en Atresplayer. En estos posts analizaremos, capítulo a capítulo, la edición patria. Valoraremos los challenges de las reinas y comentaremos outfits, salseos y momentos para la posteridad.
Vamos allá, ¡agárrate las bragas, marichocho!
El minichallenge: La pateta calienta
¡Ronda de preguntas de cultura LGTBIQ+! La cosa no empezó bien cuando, durante la presentación de la prueba, Supremme preguntaba “¿cuándo se aprobó en España el matrimonio igualitario?” y ninguna acertaba el año. Al menos casi todas se acercaron, excepto Chloe Vittu, que por algún motivo decidió elegir 2017 como año. Pa ella, el sufragio universal llegó al país el año de la Expo. La de Zaragoza, más exactamente. Aunque bueno, no está nuestro país como para hablar de demasiados años de sufragio tampoco.
Volviendo a la prueba: las reinas debían contestar preguntas mientras, a lo ‘Grand Prix‘, la pateta que tenían en la mano se iba hinchando hasta explotar. Una a una fueron cayendo hasta que la victoria fue para Vampirashian, que había arrancado comentando “claro, han esperado a que se fuera Megui Yeillow para que no hiciera el ridículo”. La verdad sea dicha, la última respuesta correcta de su competidora final, Mariana, había entrado en tiempo… pero, ¿a quién le importa realmente quién gane estas vainas?
El challenge: Makeover challenge
Una semana tremendamente especial para el ‘Drag Race’ patrio, que ha firmado con este uno de sus mejores capítulos hasta la fecha. Y es que el makeover de esta semana han tenido que hacerlo junto a leyendas vivas del travestismo de nuestro país, que las han visitado en el taller.
Las cinco concursantes han podido hablar con Sergio Satanassa, La Otxoa, La Patrick, Manel Dalgó y Dolly Drag del cambio que el arte del drag ha pegado en las últimas décadas, de cómo de complicados fueron sus inicios y de cómo perciben a las nuevas compañeras. Momentos que no solo han servido para ilustrar al público del programa sobre cómo fue el pasado de España para mucho arte LGTBIQ+, sino que además sirvió para poner en valor el esfuerzo que hacían aquellas drags que no lo tenían tan ‘fácil‘ -entiéndase- como las actuales.
Un episodio repleto de momentos emocionantes en el que, la verdad sea dicho, las cinco concursantes -y sus compañeras madrinas- estuvieron muy a la altura y se lo pusieron muy complicado al jurado. El reto tenía un pequeño giro argumental respecto de años pasados: esta vez las concursantes debían adaptarse a los looks de sus madrinas y no a la inversa. Así salió todo:
- La Niña Delantro & La Otxoa | El hecho de que Vampirashian (y el formato en sí, nos da a la nariz) emparejara tan bien a las leyendas con las newcomers, hizo que La Niña pudiera lucirse sacando su lado más punk junto a La Otxoa. Aunque su madre optara por la sencillez y la hija lo llevara al barroquismo de la Angy de 2011, la combinación fue fantástica y el vestido le quedaba como un guante. El desfile, divertido y al nivel de los looks, fue de ganadora del reto.
- Chloe Vittu & La Patrick | La verdad, vi el entusiasmo por el outift de Chloe un tanto exagerado. Es cierto que estuvo bien resuelto para que combinara con el folkore del traje de La Patrick y que la narrativa de cambio generacional se sostenía con el diseño, pero también es cierto que era más sencillo que otros de la pasarela y dependía más del ‘efecto tetas’. Un efecto que, tal y como le dijo el jurado, por fin le funcionaba bien. Y es cierto que en ese desfile pegaba todo que jugara con ellas, pero para cuando hicieron su aparición, el truco de Chloe estaba más que manido. Aún le queda aprender cuándo usar cada carta.
- Le Cocó & Manel Dalgó | Tal y como le dijo el jurado, a Le Cocó le pudo la admiración que sentía por su compañera y madre en pasarela. Su vestido lucía a no querer hacerle sombra y se quedó corto, en muchos sentidos, empezando por lo inacabado de la parte trasera, que podíamos verle parte del culo y no creo que fuera voluntariamente. De haber añadido un extra a la parte de las piernas, o al propio calzado, hubiera compensado más una parte superior que estaba bien. El desfile, como también le indicaron, necesitaba de una historia mayor, algo en lo que el pinchazo de Le Cocó, generalmente atenta al detalle, también nos sorprendió.
- Vampirashian & Sergio Satanassa | Como siempre que hay un vestido completamente negro en pasarela, es una pena que por televisión muchos detalles acaben perdiéndose. Podría haber sido más espectacular si, como indicó el jurado, Vampirashian hubiera jugado con los toques de color que sí llevaba Sergio. A pesar de ello, tanto su pasarela de madre confusa e hija guía, como los outifts en sí mismos estuvieron fenomenal: adaptados a ambas y bien relacionados gracias a los detalles (el tocado, el maquillaje…).
- Mariana Stars & Dolly Drag | Modelar es lo suyo, pero coser… no tanto. En comparación a sus habituales looks, lo de anoche para Mariana fue un ligero pinchazo. Ligero, porque como decía antes, fue un capítulo en el que todas estaban a la altura, pero mientras que Dolly apostaba por un outfit un tanto Omaíta, Mariana decidió continuar con su perfil más miss y apostó la relación con su madre a la paleta de colores y el maquillaje. Salvó los muebles, pero fijándose uno al detalle, era la combinación menos coherente de la pasarela. Eso sí, la narrativa de graduación al desfilar le dio bastantes puntos.
Los resultados
- La ganadora · Ganó Chloe Vittu, un poco por el estusiasmo extremo con el que el jurado recibió su interpretación de Isa P, un poco por compensar un vacío de victorias de su marcador con una in extemis que cumpliera dos funciones: seguir despistando al público con un reparto de victorias muy equitativo en la temporada y premiar el buen hacer de Chloe hasta la fecha.
- Las reinas en el bottom · Le Cocó pinchó por primera vez en la temporada y tuvo que enfrentarse a una Mariana que llegaba al lipsync habiendo agotado gran parte de su munición.
- Sashay, te vas · Tras batallar con ‘Las Babys’ de Aitana -una elección un tanto curiosa para semejante episodio, la verdad-, Mariana hizo las maletas porque Le Cocó sorprendió ofreciendo no solo bastante buen timing con su humor, sino también una despliegue de baile notable que muchos no esperarían.