‘Drag Race España’ está emitiendo su segunda temporada en Atresplayer. En estos posts analizaremos, capítulo a capítulo, la edición patria. Valoraremos los challenges de las reinas y comentaremos outfits, salseos y momentos para la posteridad.

Vamos allá, ¡agárrate las bragas, marichocho!

El maxichallenge: ‘Llévame Al Cielo’


El último challenge de la temporada ponía a las reinas a danzar a ritmo del que, hasta hace bien poco, era el lanzamiento más reciente de Supremme De Luxe, ‘Llévame Al Cielo‘. Las reinas debían escribir sus propia letra para la canción, haciendo que Venedita escribiera sobre ser “la más chula” y “no querer ser una drag más”, Marina sobre “no haber sido perfecta siempre”, Estrella sobre ser “gorda y divina” y Sharonne pues Dios sabe, porque cuando le daba por hacer los agudos imposibles, la voz era estupenda pero la letra sólo la entendían los delfines de la zona del Ártico.

El número ha supuesto un upgrade en cuanto a escenografía y producción musical respecto a la temporada de estreno, pero a pesar de todo ha tenido algunos momentos de bajón: las escenas rodadas en el taller no lucían realmente a ninguna de las concursantes del programa y una vez planteada la canción en el escenario, donde más tenía que haber provocado un subidón, empezaba ya a hacerse bola por lo repetitivo. Las reinas de la temporada estuvieron en un segundo plano que era lógico, pero quedaba rarísimo. Se las podía haber presentado después del vídeo en cuestión.

A pesar de todo esto, la realidad es que todas las finalistas entregaron un buen servicio y han hecho del tema de Supremme un clásico fan con toda probabilidad.

El runway: ‘Mi Mejor Drag’


El objetivo de las chicas era claro: exhibir el modelito que explicara su mejor drag. Así fueron las cosas:

  • Sharonne | Sharonne no arriesgó demasiado, apostando por una silueta clásica y un modelo que era esperable en ella, pero claro, acertó en belleza y ejecución. Su outfit tornasolado, repleto de flecos brillantes gritaba ‘drag’ por los cuatro costados, e iba acompañado de un corazón de glitter en el centro que le otorgaba un puntito medieval aún más chulo.
  • Estrella | Que Estrella ha sido siempre la reina del camp pero no necesariamente de la ejecución ha sido una obviedad durante el 75% de su temporada. Pero aparecer en una final con semejante mess… tremendito. Un modelo victoriano fatal realizado, muy de corte disfraz, que tampoco iba acompañado de su mejor día en maquillaje y pelo. La hemos visto mucho mejor en otras pasarelas.
  • Venedita | Sirvió todo el glamour burlesque del mundo, con un vestido con mucho pliegue, mucho volante, el corsé bien apretado y el desnudo bien accesible -como pudo verse en el playback-. No era lo más arriesgado de su armario, pero sí uno de los conjuntos que mejor define su drag en general. Y estaba espléndida.
  • Marina | Marina apostó por el negro durante toda la noche, tirando de un outfit elegante para su último runway, con un precioso tocado que le enmarcaba la cara y era súper efectista. Estaba estupenda, pero… ¿el punto negativo? era todo bien poco Marina, por un lado; y por otro, la peluca anaranjada con el cordel del tocado a la vista le restaba mucha espectacularidad al desfile.

El lipsync final: ‘Ni Tú Ni Nadie’


El último playback de la temporada fue extrañísimo. Minutos antes de que tuviera lugar, el programa decide expulsar a Marina por no estar a la altura del resto de concursantes del programa. Quedó un poco feo. No es la primera vez que una edición de ‘Drag Race’ elimina a alguien en plena final, pero siendo cuatro concursantes, bien se podía haber dejado a sólo dos compartiendo ese último esfuerzo, o bien se las podía haber enfrentado a las cuatro, por parejas, y hubiera quedado todo menos feíto.

El caso es que Estrella, Venedita y Sharonne se jugaron la victoria con el clásico de Alaska y Dinarama. Venedita optó por dejarse ganar, sin apenas trucos más allá de el de enseñar el culo en el segundo cinco de actuación; Estrella tiró de teatralidad pero acabó, como la semana del peluche, excendiéndose en atrezzo poco eficaz -aunque la foto de Carmen Farala fue un puntazo-; y Sharonne apostó, de nuevo, por un clásico drag: el del glitter guardado en guantes y algo del vestido.

Lamentablemente, el ‘algo‘ de vestido era el corazón, llenísimo de brilli-brilli, que al principio de la performance se le había caído al suelo. Quedó todo regulín.

Sharonne, ganadora de la segunda edición


Sharonne acabó siendo coronada tras marcarse el playback más eficaz de las tres. Un premio más que merecido, porque como concursante del programa, ha sido la que mejor ha sabido jugarlo. Y también la que más ganado tenía al jurado, las cosas como son. Nunca había pisado el bottón y pocas semanas han sido las que la han visto estar simplemente ‘a salvo’, lejos de la zona alta.

Es decir, que su victoria ha sido tan justa como predecible. Pero no quita para que se haya decidido premiar al drag pulido, maduro, con una mochila de años pero aún capaz de ofrecer mucho y seguir enriqueciendo la cultura drag española.

Es cierto que cada una de ellas podía haber ganado por diferentes motivos, pero si nos ceñimos a lo estrictamente competitivo, Sharonne merecía la corona del ‘Drag Race‘.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies