Doja Cat está en su momento más delulu. Es ese punto en el que los artistas se hacen conocidos, la fama se les hace cuesta arriba y empiezan a decir sandeces porque se olvidan de tomar el Frenadol cada mañana. Un poco estilo Kanye West, sólo que él simboliza siempre el punto más algido de esa delulez.
En el caso de Gatita Marihuana, el absurdismo le ha salido porque quiere huir de todo lo que la hizo conocida. Empezando porque no quiere hits. Cada vez que algo es un hit, le parece horrible. Aunque te llene ciudades enteras de cartelería anunciando la salida de un single y no sólo eso, sino que también se enfade cuando un fan se lleva los posters promocionales. Quiere que todo el mundo se entere, pero que nadie lo escuche.
Y este punto de chorrada artsy-fartsy arrancó cuando decidió que sus dos discos anteriores -los de éxito, vaya-, le parecían una vejiga. Dijo que no eran más que “sacacuartos” y que su álbum actual, ‘Scarlet‘, iría por otros derroteros.
A largo plazo lo que quería decir es que la mayor parte de tracks del álbum iban a ser un peñazo al nivel de ‘Attention‘, el lead single del mismo. Pero, vaya por Dios, la estrategia de fiasco sobreanunciado se le va al garete cuando ‘Paint The Town Red’ arrasa y llega al #1 de Billboard.
De modo que ha vuelto a ponerse manos a la obra para que a todo el mundo le quede claro que detesta el tema, porque a diferencia de la mayoría del disco, alguien lo ha escuchado. Hablando en un reciente podcast, ha comentado que fue el sello quien metió el track en ‘Scarlet‘:
“Paint The Town Red’ me recordaba a Target o a Macy’s… no se por qué. Simplemente es así. Y sé que empieza con un taco, que la hace un poco más atrevida en ese sentido, pero tiene también una vibra como de estirada. Creo que, estratégicamente, fue un buen añadido para el disco, imaginé que sería popular. Solo que de eso es de lo que estaba huyendo un poco, realmente.”
Y esperad a que acabe la Navidad, porque se viene speech contra su single más reciente, ‘Agora Hills‘, que de no ser por la masa de villancicos que tiene por delante, sería ya #10 en Billboard. Cuando la época vacacional pase y entre el nuevo año, imaginamos que Doja Cat tendrá varias narrativas preparadas para lo de ‘Agora Hills‘:
- Que el mismísimo Hitler la obligó a grabar el tema tras visitar a una medium y que nunca quiso incluirla en el álbum, pero que tenía miedo de que se le apareciera Mussolini con un track peor.
- Que la discográfica colgó a toda su familia de las cuerdas de un piano y no las soltaría si no incluía la canción en el disco.
- Que ella tenía grabada otra versión totalmente distinta del tema, pero que Pepe Herrero la produjo sin su consentimiento una vez entregó el disco y ella nunca llegó a enterarse hasta que lo vio publicado.
Veremos con qué sale, aunque al menos estará encantada con el funcionamiento de ‘Scarlet‘: el álbum apenas ha movido 500k mundiales desde su publicación en septiembre, unidades de streaming incluidas, y prácticamente todos los tracks que no han sido singles se mueven entre los 7-10 millones de escuchas en Spotify. American Ainhoa Cantalapiedra.
