Vaya semanita llevamos con los himnos a cuestas: cuando parecía que la situación política del país no podía resultar más ridícula, llegó Marta Sánchez a poner letra al himno de España y nos volvió a todos locos. El debate estaba abierto: ¿por qué en Estados Unidos una diva del pop puede cantar el himno y salir bien parada y aquí no?
Bueno, lo más evidente es que uno de los dos himnos tiene, por corriente histórica, un tufillo a rancio que echa para atrás, pero ojo, porque estamos de acuerdo, e incluso a favor, de que estrellas del pop intenten darle nueva vida y alejarlo de usos que, hasta ahora, han aislado bastante a gran parte de la sociedad española. Por tanto, punto a favor para Marta Sánchez. Claro que luego, se para uno a ver la letra, se encuentra con Dios, y ya la hemos montado otra vez, porque sabemos, en gran medida, quién va a acabar aplaudiendo el esfuerzo de Sánchez, y nos echamos a temblar.
Movimientos y motivaciones políticas a un lado, que nosotros nos centramos al final en lo musical y criticable, lo de Marta era un claro ejemplo de oversinging, que es lo que más hilarante nos parecía del caso: por un lado, esa costumbre suya de dicción marcada por encima de las posibilidades de su paladar:
“Jranze Esphañya, ha Tios le zoy las jracias phor nazer aqkhi, jonrrarche hascha el fhing”.
Chica, relaja la mandíbula, que te va a terminar creando una caries tanto esfuerzo. Por otro lado, las notas de ultratumba, no vaya a ser que no recorra en un verso toda la escala de notas y se nos olvide que canta bien.
De todos modos, Marta ha tenido la suerte de que, justo después de su rendición al himno -plausible y sonrojante al mismo tiempo-, la atención la pongamos en Fergie, que sí, sigue cantando porque de momento no le han dado trabajo en el Continente de su barrio -hasta que la muchacha de charcutería no coja la baja por el embarazo no puede incorporarse-, y ha acudido al NBA All Star Game 2018 para interpretar el ‘Star Spangled Banner’. Sin necesidad de inventarse la letra, porque esta ya lo tiene, y por supuesto, también habla de Dios, no vayáis a creer que sólo Marta Sánchez es creyente. Claro que el himno americano data de 1.814, y esa época, Sánchez estaba de promo con ‘Azabache’ todavía.
El caso es que, atención a los vocals de Fergie, que pierde por completo el control de la canción, tratando como de llevarla a un terreno jazzy que no sabemos muy bien quién le convenció para hacer. Terrible, apocalíptico. No es de extrañar que al público le de la risa a mitad de himno y que al final del mismo, Fergie de paso rápidamente a un “¡juguemos a un poco de baloncesto!”. Si por favor, un tupido velo a tiempo.
https://youtu.be/2XBWZI6f-38