¿Recordáis a Cococo Mean? Si no es así, os refrescamos la memoria:
- Hubo un tiempo en el que ‘Operación Triunfo’ se hacía en Telecinco.
- La cadena potenció más el reality que el talent, y en 2008, ganaba ‘OT’ Virginia Maestro.
- No por falta de talento, como los años han dejado claro, pero sí ayudada por una potente narrativa de tipo instituto.
- En aquel momento, el jurado de ‘OT’ lo formaban Noemí Galera, Risto Mejide, Javier Llano y Cococo Mean.
- Cococo Mean estaba ahí porque era coreógrafa. Poty ya estaba obsoleto.
Pues bien, 13 años y dos ediciones de ‘OT’ a espaldas después, Cococo ha decidido rajar sobre el formato en una entrevista en Crónica Global en la que trata de hacer algunos puntos pero falla miserablemente:
“En televisión, todo lo que son apariciones de jurados, como en ‘Operación Triunfo’, me horroriza. Estos talent shows están llenos de mentiras, no es verdad nada, ni quién gana ni quién pierde. Son imposiciones de las direcciones de los programas porque interesa más uno que otro.”
¿Son shows llenos de mentiras? Mujer, como bien dejó claro Noemí Galera en la última edición, eso es un programa de televisión. Quién quiere formarse en lo musical, que vaya a un conservatorio. Y como programa de televisión, tendrá sus artimañanas para conservar el factor televisivo, sus favoritos y sus menos favoritos para eso. Ahora bien, asegurar que ellos deciden quién gana y quién pierde… pues ya nos diréis cuál era el atractivo que ‘OT’ le veía a Ainhoa, Nahuel, Mario, Lorena, Nia o Vicente. A nivel televisivo, vaya. Y en lo músical, no nos hagáis hablar.
Pero aunque Cococo podía haberlo dejado ahí e intentar marcarse ese gol de persona repentinamente woke que , pasada década y media, descubre que los talents televisados tienen su punto de manipulación, sigue hablando de su experiencia en el programa:
“Cuando yo fui jurado de ‘Operación Triunfo’, tuve que eliminar a Pablo López. Me tocó hacerlo y yo no quería. Estas elecciones te las mandan porque te dicen ‘tú hoy eliminas a este y Risto hoy elimina a este’ antes de ver la actuación. Cuando tuve que eliminar a Pablo López no tenía argumentos para decir que lo había hecho mal, porque lo hizo perfecto”.
“Nunca volvería a hacerlo si por mí fuera, porque no volví a casa contenta. Lo que yo sí elegía eran las palabras, cómo lo decía, cómo me dirigía a ellos, pero no el resultado. Si vas allí a hacer un papel, como otros compañeros míos de la mesa, tu conciencia puede estar tranquila. Pero yo no iba a hacer un papel, yo iba a ser honesta y no podía. Fue una total decepción”.
Es curioso ese desazón de Cococo Mean en 2008, ese pasarlo mal al volver a casa, esa conciencia intranquila, teniendo en cuenta que la coreógrafa volvió a ‘OT’ en la edición de 2009, en la que también fue jurado. Imaginamos que lo fue profundamente a disgusto. Siempre de morros, pero cobrando su cheque. Sin hacer ningún personaje.
Eso sí, su mayor metedura de pata es la que sostiene todo su speech: ella jamás nomina a Pablo López. O “elimina”, como dice. La única vez que López fue nominado en ‘OT 2008’ fue en la gala 9, momento en el que Risto Mejide lo pone en la palestra y es salvado por los profesores. Termina segundo con el 45% de los votos del público.
Ay Cococo, hija, antes de ponerte a hacerte la woke y la artística chequea bien los factos y ten a mano un discurso que no parezca el de una universitaria de Primero que empieza a descubrir el mundo que la rodea. Que el baile también tiene mucha plancha y no te vemos sacar la tabla.
