Señores, la esperanza es lo último que se pierde, así que seguiremos pendientes de los múltiples documentos de identidad de Cheryl, porque en cualquier momento se decidirá, y pasará a llamarse Tetillas LaRue. En ese momento, el pop habrá tocado techo y nada se podrá hacer para que la situación mejore. Ni Madonna, ni Madonno, ni un comeback de Michael Jackson desde el inframundo, ni un All Stars con todas las popstars muertas regrabando el ‘Heal The World’ desde el más allá. Nada, Tetillas LaRue lanzando un single y acaba con todo eso.
De momento, sin embargo, todo esto no es más que un sueño, porque Cheryl ha vuelto a cambiarse el nombre, esto es real, pero por el de… Cheryl Tweedy. Sí, amigos, volvemos a las andadas después de ser, erm, Cheryl Tweedy, Cheryl Cole, Cheryl Fernández-Versini, y Cheryl. Ahora, la nueva identidad de la cantante de clásicos como ‘Amnesia’ es vintage, es nostalgia y ya os decimos que va a durar menos que nada.
¿Por qué? Porque estamos viéndola en breve pasando por el altar con el que es el padre de su hijo Bear, Liam Payne. Y por tanto, otra vez a volver loca a la señora que hace pasaportes, para hacerse llamar Cheryl Payne y acerca acumular más huellas dactilares suyas en esa oficina que en el estudio de grabación de Girls Aloud. Vamos, que con todas las huellas de Cheryl podrían pintar un dálmata.
Pero como os decimos, antes del Payne volvemos al Tweedy. Ahora la pregunta es: si se decide a volver a la música -hace ya 3 años de su último trabajo- ¿se seguirá haciendo llamar Cole, Tweedy, Payne, LaRue o seguirá con Cheryl Sin Apellidos, en plan Cher?
