Cardi B es divertida. Bueno, quiere serlo, porque al final siempre queda más cerca de Aramís Fuster en el ‘Deluxe’ diciendo «dejadme ser divertida» que de serlo en realidad, con hecho y datos. Pero entendemos el concepto: es como una chica de barrio que de tan street es como cómica. Sólo que hay una fina linea entre la comicidad y necesitar una adaptación curricular en tu vida diaria, y mucho nos tememos que Cardi B ha superado esa fina línea y parece sufrir algún tipo de tara. Tara Reid, como ejemplo.
El caso es que la muchacha se ha pasado esta semana por el show de Jimmy Fallon, a, supuestamente, promocionar la puesta a la venta de su nuevo single, ‘Bartier Cardi’, pero en plena entrevista, se ha dedicado más bien a responder con ruiditos y hablar como si una niña de cinco años hubiera sufrido un accidente cuyas secuelas, irreversibles, la han dejado hablando como un personaje secundario de ‘Raven’.
Y sí, la rapera habla de su nominación a los Grammy («es como si ya me lo hubieran dado»), de su futuro matrimonio con Offset de Migos («siempre decía que íbamos a casarnos» -matrimonio de 10 meses alert-), y obviamente, del lanzamiento de ‘Bartier Cardi’:
«No lo llamamos ‘Cartier Cardi’ para que Cartier no nos demandara.»
Y claro, todo esto entre «you wanna know sumtin’?» -con acento latino exagerado, como de extra en ‘Devious Maids’, «okurrrr», «mhh» y demás ruidos de granja, que uno no sabe si está manteniendo una conversación o tarareando la versión censurada de ‘Fuck You’ de Lily Allen que sonaba en Radio 1.
‘Bartier Cardi’, por cierto, con la que también os dejamos a continuación, es bastante decente, ella rapea un poco mejor que en ‘Bodak Yellow’, donde no lo hacía demasiado bien, por mucho que el público se volviera loco, y tendrá que probar si lo suyo no es, como se intuye, flor de un día. De momento, es #2 en iTunes y top30 en streams.
