Ariana Grande aparece por primera vez en televisión con ‘No Tears Left To Cry’, abrumadoramente inspirada por la actuación de Barei en Eurovisión. Grande dice ‘yay yay yay’ tirada en el suelo del plató de Jimmy Fallon al arranque de su primera presentación, pero pronto se pone de pie, igual que la cantante de los retretes, para dar forma a una actuación que poco o nada tiene que ver ya con nuestra propuesta festivalera de por entonces.
Ariana, que ha aparecido sin peluca platino pero con un postizo que parece haber sido fabricado por Rocío Cabrera con cuatro pelucas del Tiger, se ha paseado por el escenario que ha montado para la ocasión, esta vez en serio, algo inspirado por ‘Dentro Del Laberinto’, aquella fascinante película en la que David Bowie interpretaba a Julia Otero. Escaleras por todas partes, para emoción de Isabel Gemio, y proyecciones capaces de enloquecer a cualquier persona con TOC, que transformaban el plató en un imposible repleto de direcciones a ninguna parte.
Sorprendentemente, Ariana Grande ha conseguido interpretar ‘No Tears Left To Cry’ sin desplomarse por los escalones, por lo que suponemos que lleva ensayando la actuación desde que lanzó ‘Focus’. La cantante ha subido, ha bajado, ha hecho el amago de buscar seguridad hacia la segunda mitad, cuando no veía demasiado claro qué estaba pisando, y finalmente, se ha marcado una performance de lo más resuelta, ella sola, sin bailarines, sin más historias.
Eso sí, desde aquí hacemos un llamamiento al equipo de estilistas de la muchacha: que en vídeo apareciera con un vestido plateado de Modas Marisa tenía un pase, porque tampoco necesitaba algo que llamara especialmente la atención, pero, amigos: esta especie de baby rosa con polainas es una auténtico exceso que no tendría cabida ni en el armario de Tina Knowles. Por favor.
https://youtu.be/yJBMtkLtKHE