Durante las próximas semanas, nuestra intención será analizar el paso de España por Eurovisión: sus éxitos, sus fracasos, sus delirantes puestas en escena… todo bajo nuestra particular lupa. Como no queremos que la historia se alargue hasta el próximo 2029, y con la intención de hacer más secciones de carácter estúpido, hemos decidido comenzar nuestra andadura eurovisiva en 1990. ¡Esperamos que disfrutéis de este viaje de 25 años!
La canción
Después de un quedar bien David Civera en 2001, la España de ‘Operación Triunfo’ decidió no apoyar la candidatura de David Bisbal con ‘Corazón Latino’, que básicamente repetía la formula de la exitosa propuesta anterior, y se lanzó a la piscina con un número disco pop de la gran favorita de la nación en aquel momento, Rosa López. ‘Europe’s Living A Celebration’ podía estar vista como un cuadro de canción en aquel momento, y siempre habrá quien diga lo típico de “¿realmente creíamos que ganaríamos con esto?”, pero nosotros vamos a romper una lanza a su favor.
‘Europe’s Living’ es una canción pop comercial estupendamente bien construida, y si no, que se lo pregunten a cualquier persona de la generación ‘OT’ que, posiblemente, será capaz de recordarla más allá del estribillo. Persigue una básica de las canciones pop: verso-puente-estribillo-verso-middle8-estribillo, pero ¿y lo bien que lo hace? Es decir, melódicamente, ‘Europe’s’ sería algo así como el ‘Wannabe’ español: es tan ridícula como adictiva, tan torpe como perfecta, tan de consumo rápido como de memoria histórica.
Sí, podíamos haber ganado con ‘Europe’s Living A Celebration’, ¿por qué no íbamos a poder ganar?
La puesta en escena
La puesta en escena de aquel año sí que fue el reflejo exacto de lo que era la época ‘OT’ en España: modelitos imposibles que trataban de resultar modernos pero no lo eran en absoluto, pasos de bailes que harían del posterior ‘Aserejé’ casi una hombre del ballet clásico, y un coro que, aunque por una vez sonó en condiciones, terminó teniendo demasiada presencia en el escenario.
Y de hecho, y no es por hacer la broma, pero Rosa tuvo que tener mayor peso en aquella actuación. La vistieron de negro, que sí, adelgaza, pero la diluye entre el coro con toques rojos, la llenaros de tantas capas que parecía una cebolleta caminando por el escenario, y finalmente, la rodearon para que aún se la viera menos y destacar a los coristas contemporáneos, y no a la muchacha de pueblo que toda Europa tenía en pantalla. Craso error, amigos escenógrafos.
Rosa era la que tenía que haber ido de rojo, Rosa era la que tenía que moverse en todo caso hacia el coro y no el coro hacia ella, Rosa era la que tenía que haber pisado fuerte en una canción que tenía hecha a la medida de su voz. Yo sí pensé en ganar con aquel tema, pero realmente, las posibilidades se me quedaron lejanas al terminar ella su actuación.
El resultado
Todos recordamos a Rosa completamente devastada tras no sólo no ganar Eurovisión, como todo el país pensaba que haríamos, sino además, empeorar el resultado que David Civera nos había otorgado en 2001. Sin embargo, la decepción hizo que perdiéramos de vista que López había quedado en una estupenda 7ª posición por la que hoy mataríamos, recibiendo los 12 puntos de Suiza, Bélgica y Francia, y siendo votada por 11 de los 24 países participantes.
Aquel año la victoria se la llevó Letonia con Marie N, culpable en cierto modo de que las puestas en escena empezaran a cobrar un peso significativo en Eurovisión. Lo hacía, además, dándonos otro hachazo, puesto que ‘I Wanna’ era una producción latina que bien podía haber llevado España, y que fue notablemente criticada por sonar al ‘She Bangs’ que Ricky Martin había lanzado a finales del 2000. Sin embargo, su ajustada victoria siempre estuvo más motivada por el cambio de vestuario que se marcó durante la actuación, ya que era de las primeras veces que un artista se sacaba un truco de la manga y ganaba Eurovisión. Letonia se llevó los 12s de 5 de los países participantes.
¿Qué fue de ella?
Poco queda de explicar de lo que fue de Rosa López: la artista ha continuado una carrera con altibajos pero de general éxito, con 7 álbumes de estudio –está a punto de lanzar el octavo– de los cuales 6 han obtenido al menos la certificación de Disco De Oro. Por el camino ha dejado un puñado de canciones populares como ‘Don’t Stop The Music’ o la extra-dance ‘Más’, y aunque últimamente ha estado ligada a producciones televisivas (‘Tu Cara Me Suena’, ‘Soy Rosa’), es de las últimas eurovisivas en tener una carrera en condiciones después de pasar por el Festival.
