El verano está a punto de llegar y con él, nuestras ganas de cachondeo, chiringuito y movimiento pélvico descontrolado, a medio camino entre un ataque de epilépsia y lo que en nuestra mente es la coreografía del ‘She Bangs’ de Ricky Martin. Ya os decimos que no lo es.
Y en ese mismo mood parece que nos encontramos a María Peláe con su nuevo single, ‘El Grillo’, después de su aporte de folclórica más melódica en ‘El Deshielo’. La Peláe ha vuelto a sacar del cajón su mejor perfil lolafloresco, con una canción cargadísima de humor y un vídeo a la altura, donde se describe como más simple que el contenido de unas patatas de ‘Sabores De La Esteban’. Podemos verla leer el Vanity Fair y tener la Pronto dentro realmente. Y eso que en la Vanity aparece la Reina Camilla en portada. La de Carlos, no la de Shawn. Que también tenía de origen su punto kitsch.
Peláe nos habla en ‘El Grillo‘ de lo que es tener una pareja cargadísima de postureo mientras una lo que quiere es una jarrita de sangría y poder salir en vaqueros a dar un paseíto. María se define “más antigua que un mueble bar”, mientras de su pareja habla como amante del vermut y del brunch. También os decimos: o una cosa u otra, hacer vermut y brunch es ya rizar el rizo del paripé castizo. Es ya aquello la cabellera de Bisbal. Es Rosarillo. Es el maldito gato haciendo uy, uy, uy, sin que nadie termine de preguntarle qué coño le pasa y por qué no maulla como cualquier gato normal.
Gracias a ‘El Grillo’ descubrimos también quién ve a Susanna Griso: María Peláe. Aunque sinceramente, su espíritu es más ‘Aruseros‘ por la mañana. Pero claro, cualquiera les aguanta más de cinco minutos hablando de cómo un camión de fruta chino ha perdido cuatro melones en un accidente. Todos mirando a cámara y haciendo comentarios del estilo de “bueno, podría haber perdido doce” o “si te fijas, el camión tiene cuatro ruedas”, mientras se escuchan onomatopeyas insufribles de fondo. Normal que María prefiera a Susana, la verdad.
Y menos mal, porque si no iba a salirle el share a devolver a la pobre por las mañanas. Eso sí que iba a ser un sonido digno de ‘El Grillo’.
Será tu rollo si: te haces photoshoots en el trigal del pueblo, desayunas torta, tienes una cafetera en el patio.