Dice Selena Gomez que está cansada. No de la familia Rivera, aunque probablemente también ahora que es latina y lo mismo sintoniza Mediaset de cuando en cuando. Está cansada de que no la tomen en serio y de pelear por una carrera musical que, a todas luces, no termina de llenarla.
En su última entrevista para la revista Vogue, la mocatriz ha asegurado que está planteando dejar aparcados su lanzamientos de aquí en adelante:
“Es duro seguir haciendo música cuando la gente no te toma en serio. He tenido momentos de pensar “¿para qué? ¿por qué sigo haciendo esto?”. ‘Lose You To Love Me’ fue la mejor canción que he lanzado y para mucha gente aún así no fue suficiente. Creo que hay mucha gente que disfruta de mi música, que es algo por lo que estoy súper agradecida, y por ellos es que sigo haciéndola, pero creo que la próxima vez que grabe un álbum será diferente. Quiero darle una última oportunidad a la música antes de retirarme de ella. “
Lo que más nos llama la atención es que se excuse con esto en vez de decir que la música no le llena tanto como otras actividades y punto pelota. Porque claro, dice Selena que “no la toman en serio” como cantante. ¿Realmente piensa que como actriz tiene un perfil más del tipo Glenn Close? Es decir, si centra su carrera en la actuación, tal y como explica en la entrevista que pretende, no será por lo en serio que la toman en la industria tampoco.
Es llamativa la percepción que tiene de sí misma en cuanto al terreno musical. Se queja de que no “fuera suficiente” con ‘Lose You To Love Me’, que considera “su mejor tema”. Discrepamos y mucho, claro, pero es que la canción fue #1 en Billboard, está certificada Doble Platino en Estados Unidos, fue top5 en Canadá, UK, Australia, prácticamente todo centro Europa, y con 650 millones de escuchas, es de sus temas más populares en Spotify. ¿Qué más garantías necesitaba la artista?
Quizá tampoco ayuda que, con el paso de los años, los skills de Gomez como artista no hayan visto una mejora fuera del estudio: sigue sin ser una persona de performances contundentes, ni interpretaciones dignas en directo o giras memorables. Le falta poner en sus presentaciones la magia que si tienen sus hits -con un sonido bastante reconocible en el fondo- y el imaginario que suele manejar para los álbumes.
En cualquier caso, si lo suyo es más la actuación o la producción musical, a la que también se refiere en la entrevista, nos parece estupendo que se vuelque más en ello, así como que su siguiente álbum se lo tome con más calma y lo redireccione. El fiasco de ‘Rare’, un álbum que sabía a descartes, bien lo pide. Y no parece que ‘Revelación’ vaya a terminar de arreglar aquello.