Karol G lleva semanas sin pegar ojo la pobre. Debe ser que por eso en el vídeo de ‘Bichota’ sale cada noche a estrenar un lookazo y montarse una coreografía por las calles. En otros planos sale de día, pero que no os lleve a confusión: es justo el momento de la siesta, y nada, la pobre no puede hacer otra cosa que aprovechar para dar en ese momento sus clases de hípica.
¿Todo por qué? Pues ya lo anuncia en el segundo estribillo de ‘Bichota’, su nuevo single: “porque roncan, pero nadie puede con su pum-pum”. El pum-pum deben ser las hostias que Karol pega en la almohada a ver si el sonido para y concilia el sueño, pero nada. Por mucho que no puedan con su pum-pum, la paz le aguanta cinco minutitos de nada.
La mejor parte de la historia llega poco después. En el momento en el que Karol G se da cuenta de que no es un fenómeno aislado de su casa y que hay amigas que tampoco consiguen conciliar el sueño, porque tienen parejas de día y locomotoras de vapor de noche. “Adivina quién viene por ahí, viene Juana, viene Mari”, dice Karol G en una clara referencia a las amigas de la partida de brisca de los domingos.
Y claro, estando todas allí, pues otra coreografía para la saca, esta vez en camisón y con el pelo planchadísimo, rollo casual, rollo breezy, como si el plan hubiera surgido de modo natural. Que no nos extraña tampoco, porque Karol G tiene esa facilidad para firmar bops de reggaetón moderado como este: medios tiempos que te hacen bajar el culo hasta rozar el suelo, que cualquiera que te haga una foto fuera de contexto pensará que eres Amador Mohedano un día de playa cualquiera.