Amaia Montero va a necesitar de mucha suerte en su siguiente era. De mucha, muchísima suerte. Porque en los últimos días no sólo se está ganando el desprecio de sus haters, sino también el del propio fanbase que la defendía hasta ahora y el de muchos medios que sigue acompañándola en el camino.
Y todo porque Amaia Montero no tiene la capacidad suficiente para llevar sus redes sociales. Pero hasta ahora podía haber resultado cursi, torpe e incluso bocachancla. Hoy ha pasado de nivel y ha posteado algo directamente en contra de su compañera Leire Martínez, actual vocalista de La Oreja De Van Gogh. Eso sí, aunque hace unos días comentaba en su Twitter que “no le gustaban los cobardes”, ella peca de serlo absolutamente y se refiere a Martínez como a “ella”, sin citarla o enfrentarla directamente. Unos comentarios pasivo-agresivos que la describen como alguien maleducada, agria e irrespetuosa con sus compañeras de trabajo.
¿Y todo por qué? Pues por un suceso con las firmas de la actual La Oreja De Van Gogh, en las que a petición explícita de un fan, Leire firmó en los primeros discos de la banda, en los que no cantaba. De nuevo, a petición explícita de un fan. Pues bien, en vez de dejar el tema después de montarla el primer día y quedar como una neurótica, el segundo ha ido a más, respondiendo así a los comentarios de la revista Cuore, que se hacía eco de lo ocurrido:
Atención al “¿creéis que alguien podría convencerla (no sin antes arrodillarse ante ella)…?”. Hay que ser una mala persona para posicionar a sus compañeros de grupo -a los que hace días llamaba ‘sus ángeles’, recordemos- en una situación así cuando los sabe de encuentro en encuentro con la prensa. Cuando sabe que les terminarán preguntando por eso en vez de hablarles del disco. O se es muy retorcida, o se necesita bastante ayuda. Una de dos.
Amaia compara el contrato de una hipoteca con la firma en un trozo de papel a un fan, tenga la foto de ella o la del Príncipe Carlos y Camila. Que Leire firme en un libreto no la hace autora de los temas, ni deja a Amaia en una peor posición, ni provoca ninguna situación. Su ataque de histeria infantil sí que lo hace. La deja a la altura del betún, en la que lleva como un lustro, y de la que tanto se queja de esta a causa de la imagen que la prensa da de ella. ¿Esto también se lo han inventado los medios?
Montero dijo haber vuelto de “curarse” hace unos meses, pero claro está que está tocada y hundida, y para el público más allá del estrictamente fan, su mapa de estrategia ha quedado claro: ella pensó que se iría del grupo y volvería cuando quisiera porque no podrían seguir. 13 años después, la que sigue a duras penas es ella.
Mientras hemos escuchado a Amaia Montero decir de Leire que “no la conocía, que no sabía ni quien era”, “que estaba haciendo un papel…. correcto” y ahora esto, los miembros de La Oreja De Van Gogh, su cantante más longeva incluída, dejan claro que tienen un saber estar muy por encima del de Montero.
Amaia, por cierto, ha dejado de seguir a Leire Martínez en redes sociales, aunque esta última aún mantiene su follow a la donostiarra.
