Kanye West está cucú. Puedes leer esto en cualquier momento desde que comenzara su carrera y siempre encontrarás una excusa, en algo que ha dicho o hecho, para refrendar la teoría. Kanye West por la noche no duerme, lo que hace es reposar, y de las cuencas de sus ojos, cada cuarto de hora, salen dos cucos despelujados a hacer “cu-cu, cu-cu”. Vamos, Kim no da abasto en antiojeras ya, la pobre. Ha creado su propia marca sólo por ahorrarse comprársela al resto. Lo único positivo de toda la situación, es que si algún día fueran juntos a un centro comercial y North se perdiera en algún pasillo, no habría problema porque Kanye está entrenadísimo en eso de perder el norte.
¿Y cuál ha sido la última chorrada del rapero? Bueno, podríamos crear un tomo digno de la Larousse con el tema, pero tras anunciar que se iba a presentar a Presidente de los Espantos Hundidos, ha hablado con la revista Forbes en una entrevista exclusiva. Esto es, a grandes rasgos, lo que cuenta:
- El Coronavirus se cura rezando, porque hemos cabreado a Dios y está hasta el papo de nosotros.
- Ya tiene vicepresidente para su candidatura y no tiene ni idea de impuestos, pero no se qué de Dios también aquí.
- Estuvo malo con el Coronavirus en febrero. Le contaron que Drake también y él supuso que no estaría tan enfermo como él. La competencia por enfermedad.
- Es anti-aborto porque lo dice la Biblia. Lo del retraso no lo dice la Biblia, pero también se lo ha agenciado.
Lo mejor, sin embargo, es cuando saca su mejor Miguel Bosé, y se le escapa el Don Diablo hablando de las vacunas:
“Hay tantos de nuestros hijos siendo vacunados quedándose paralíticos… de modo que cuando dicen que van a solucionar el Covid con una vacuna, son bastante cauteloso. Es la marca de la bestia. Quieren ponernos chips dentro, para que hagamos todo tipo de cosas, para que no podamos cruzar las puertas del cielo. Cuando digo ellos, me refiero a los humanos que tienen al demonio dentro. Y lo más triste es que no llegaremos al cielo, que habrá algunos de nosotros que no lo conseguirán.”
Tres cosas:
- Dios quiere muchas cosas, Dios también quiere que dejes de hacer el imbécil y ahí sigues. Dios también quiere un álbum a la altura de los 2010s y le va a dar flato esperando. Dios, seguramente, no espera que se cure el Covid-19 si fue él quien lo envió. Para qué le dices a la gente rece.
- Luego, los chips. A ver, si nos van a implantar un chip, esperemos que se aseguren luego de que se puedan actualizar los datos y demás. Que te ponen uno con poca memoria RAM, te da como un glitch, empiezas a guiñar un ojo a lo Millán Salcedo, y chica, para eso prefería estar ahogándome con el Covid.
- A las puertas del cielo más vale que no lleguemos todos, porque se monta ahí una muchedumbre que nos terminan confinando a todos en el limbo, porque no habría mascarillas para todos. Que San Pedro no es precisamente Paz Padilla, que se pasa la vida cosiendo mascarillas.
Por cierto, ¿no era el 5G el que iba a acabar con nosotros? ¿O las vacunas? ¿O era Bill Gates? Os lo digo claramente, si hemos sobrevivido a la carrera de todas las artistas llamadas Jessica que hayan salido del Reino Unido, podemos también con un chip, una señal de móvil y un millonario.