Cuando Lady Gaga retrasó su nuevo álbum por el Covid-19, auguramos que en algún momento se le filtraría antes de ponerlo a la venta. No ha ocurrido, porque el disco se lanza ya a finales de mes, pero otra filtración sí que ha tenido lugar: un grupo de hackers han lanzado un montón de información de la cantante desde las cuentas de su despacho de abogados. No pequeñas cosas, más de 500 gigas de información sobre la artista a los que han tenido acceso.
Y claro, en las últimas horas, diferentes cuentas de Twitter de la artista se han venido haciendo eco de los datos que se han hecho públicos. Lo que habría cobrado por esto, lo que gastó en aquello, y los planes que tenía aquí y allá hasta la publicación de este álbum.
Hemos recopilados los más interesantes en el este post, aunque todo apunta a que el bombardeo de información continuará según las horas avancen. Por ahora, no se ha filtrado nada *especialmente* escandaloso.
Los contratos y salarios
Los datos de los que se hacen eco en redes sociales pasan de los más bajos ingresos hasta los más altos. Por ejemplo, parece que Lady Gaga apenas cobró un dólar con su campaña para Versace, que habría llevado a cabo en un momento muy delicado de la empresa, como favor personal a Donatella, a quien está muy unida. O que le pagaron 2.000 dólares por su presentación en los Oscars de 2015, donde homenajeó a Julie Andrews. Francamente, no contemplábamos siquiera la posibilidad de que este tipo de trabajos fueran remunerados, aunque tenga sentido.En el otro extremo, ingresó 100 millones de dólares por el tour ‘Enigma’, esa residencia en Las Vegas en la que habría firmado por 72 shows. Además, ingresó 5,5 millones extra por acudir al Super Saturday Night.
Este contrato, según indican los documentos, prohibe a la artista realizar conciertos a menos de 160 kilómetros de la ciudad o llevar a cabo más de 2 Festivales al año en Estados Unidos, salvo que sean aprobados por la MGM. Tampoco son unas condiciones escandalosas, francamente.
Sin embargo, no sólo se habla de sus condiciones: gracias a estos datos también sabemos que T.I., Too Short y Twista cobraron 20.000 dólares por subirse al carro de ‘Jewels N’ Drugs’, o que Christina Aguilera apenas se llevó el 10% de las ganancias de ‘Do What You Want’, que no tenía permiso para alterar y que sólo podía cantar los versos que le ofrecieran. Firmó el contrado dos días después de su actuación en ‘The Voice’. Gaga no tenía previsto tener a R. Kelly en la grabación original, pero DJ White Shadow se lo propuso y la convenció.
También se habla de su relación con Interscope, su discográfica: este finalizó cuando Gaga lanzó ‘The Cure’, pero la artista decidió renovarlo por tres álbumes más, sumados a los 5 que se habían lanzado anteriormente. La discográfica le regaló una yegua, Arabella, en señal de agradecimiento.
Los presupuestos
El vídeo de ‘Applause’ costó medio millón de dólares, pero Lady Gaga disponía del doble de presupuesto para su actuación en los VMA de 2013. De ese millón que podía haber utilizado, usó algo más de 638.000 dólares. Bastante, considerando que su show completo de Coachella costó 3 millones de dólares que ella pagó de su bolsillo. Y también bastante si consideramos que la segunda parte de ‘Monster Ball Tour’ costó exactamente lo mismo que aquel festival, y que también lo pagó Gaga por la negativa de su discográfica. La gira llegó a recaudar 225 millones dólares, una de las de mayor éxito de la historia del pop femenino.
Interscope puede que no inviertiera demasiado en aquel tour, pero sí lo hizo de cara al estreno de ‘Artpop’: 25 millones de dólares soltó la discográfica para la promo de un álbum que dio bastantes menos resultados de lo esperado, considerando que Lady Gaga venía de vender unos 6 millones de copias de ‘Born This Way’. Ni los singles ni las ventas del álbum llegaron a compensar semejante inversión publicitaria a largo plazo.
Las curiosidades
Entre otras cosas, los documentos revelan que Lady Gaga tenía planeado aparecer en la Super Bowl de Beyoncé, con la que interpretaría ‘Telephone’ en directo. No ocurrió, aunque no se especifica cuál fue el motivo: una década después del estreno de aquel single, las dos cantantes siguen sin haberse reunido jamás para cantarlo en directo.
La cantante también debía haber escrito la canción de la Copa Mundial de 2014, que finalmente caería en manos de Pitbull. Además, cuentan que Diane Warren y ella escribieron otro tema para la banda sonora de ‘A Star Is Born’, ‘Up’, que terminó fuera del tracklist final del disco.
Lo más curioso de lo conocido hasta ahora es que se revela que la estatua que Gaga recibió de Jeff Koons para ‘Artpop’ -la de la bola azul entre las piernas- fue destruida hace años. Todo el decorado del ‘ArtRave’ fue destruido, y de hecho, el artista se enfadó bastante durante la fiesta presentación del evento, porque un seguidor de Gaga vandalizó la estatua haciéndole una marcas. Koons llegó a demandarlo y el seguidor tuvo que hacer frente a un pago de 100 mil dólares por estropear la obra. Si llega a saber que acabaría en un contenedor meses después…