Mes y medio de ‘Operación Triunfo 2020’ y seguimos sin ver demasiada espabilina entre sus concursantes. Las galas hacen aguas por muchos factores, pero uno de ellos es que los protagonistas no saben manejarse con el medio: en 2017 tampoco sabían cómo hacerlo, pero tenían un desparpajo muy superior que dejaba grandes momentos en las galas. Este año, Roberto Real necesita un botellín de agua en la mano de tanto como le toca hablar para sostener el show.
En el escenario, tres cuartos de lo mismo, no hay interacción, ni evolución, ni claros favoritos, ni numerazos. Este ‘OT’ se mantiene, pero no despega.
Así vivimos la sexta gala del último ‘Operación Triunfo’:
Los nominados
Los nominados de esta semana se movieron entre los previsible y lo regulero. La elección de canciones fue lo que fue, y vimos dos clásicos bien manidos en el escenario, excesivamente pensados para la voz de los dos artistas que los eligieron y una canción que se comió al otro nominado.
Empecemos con Anne, que eligió ‘Unchained Melody’. Su actuación nos sirvió para ver que en ‘OT’ no existe comunicación alguna entre el departamento de arte y el de realización. El escenario, precioso. El vestuario, un cuadro. La realización de la actuación, más cuadro aún. Esos planos temblorosos, ese navegar por el escenario sin que pudiéramos ver la plataforma superior en la mitad de la actuación. Lo que debió ser algo sobrio y contenido terminó siendo una actuación de bar. Ella bien, porque es el tipo de canciones en las que ella está bien. Pero no hubo un momento de sorpresa, no dio pie a que se conectara con ella, no hubo emoción alguna. Y Anne hizo las maletas porque debía hacer las maletas.
Flavio eligió ‘That’s Life’ y se marcó un karaoke caro de manual. Vocalmente bien, no trasmitió nada en absoluto y se limitó a seguir las letras y los tonos como si esto fuera una actuación de Vicente en ‘OT 3’. A Flavio le falta frescura, appeal comercial y emocional, esa que le podían dar temas como ‘Shotgun’ pero que desde luego no le dan clásicos de Frank Sinatra que transforman ‘OT’ en ‘Tu Cara Me Suena’. La ambientación de casino de Palazuelos fue otro enorme fail.
Mejor fue la que le montaron a Bruno con ‘Lately’, pero la canción se le terminó yendo de las manos y quedó muy por encima de lo que él pudo hacer. Hubo momentos bonitos en lo vocal, cercanos a un perfil más Jamie Cullum, pero en el momento de los grandes esfuerzos se veía sufrir al cantante y el sufrimiento traspasaba la pantalla. ‘Lately’ debe ser apasionante pero cantada con cierto relajo, y Bruno no pudo hacerse con el tema como para lograr su objetivo.
La mejor actuación de la noche
La gala 6 fue tan pobre, que sólo dos actuaciones nos parecieron dignas de mención: la de Anaju y Maialen y la de Nia y Jesús, que es la que hemos terminado eligiendo. ‘La Última Noche’ es un tema que no debería tener cabida en una gala orientada a un público de 20 años, salvo que se adapte de algún modo aportándole frescura, porque toda la puesta en escena e instrumentación quedaron como de gala de José Luis Moreno de 1993.
Dentro de lo casposo del momento, Nia y Jesús se metieron en su papel de personajes telenovelescos sin perder el control y terminar siendo más ‘La Casa De Las Flores’ que ‘Abigail’. Jesús nos convenció bastante más de lo habitual, estuvo elegante, comedido, afinado, se marcó un número bonito que acompañó al de su compañera, que se lució más porque el papel de femme fatale lo bordó a golpe no sólo de voz, sino también de miradas, movimientos y gestos.
La risa floja de ambos tras quedarse frente a frente al final de la actuación fue un plus a todo el número, muy bien ejecutado.
La peor actuación de la noche
Vamos a ver: ¿una semana ensayando ‘The Loco-Motion’ y Gèrard fue incapaz de mantener la sonrisa en cámara con una canción así de divertida? ¿Una semana ensayando ‘The Loco-Motion’ y nadie supo corregir a Eva el gesto de mala leche que se le ponía en sus solos? Algo falla. Porque sí, el bailecito simpático estaba, la canción es una petardada divertidísima y aún así, no consiguió levantar a nadie a bailarla.
Eva estuvo más resuelta en los momentos de solista de Gèrard, pero es que la cámara no la enfocaba a ella. Cuando sí la enfocaba, Eva estaba poniendo incomprensibles caretos o directamente parecía enfadada entonando el single. Su compañero, directamente parecía ofendido con el reparto de temas. Como transformaron un número divertido en lo más soporífero de la noche, es un auténtico misterio. Los dos debieron estar en la cuerda floja, pero él se salvó por la inmunidad del favorito, y ella se salvó por el voto de los compañeros.
El resto de actuaciones
- Rafa & Samantha | ‘La Lista De La Compra’ | Él está estancado en una perpetua Gala 1. Claro que la selección de canciones que le han dado hasta la fecha no le han llevado a evolucionar lo más mínimo. Ella salvó el número con una buena interpretación y un desparpajo que ya podía resultarles contagioso al resto. Samantha es la única que sabe manejarse en las galas a nivel televisivo. Y llevamos mes y medio en esto.
- Maialen & Anaju | ‘Con Altura’ | Fue la otra actuación comentable de la noche: la adaptación pop-punk de ‘Con Altura’ les quedó lucida a ambas, aunque Maialen estuvo menos suelta que su compañera. Anaju se vino arriba y sacó a pasear unas tablas que ya es hora de que tengan también el resto. Aunque sea en menor medida.
- Hugo | ‘Ya No Quiero Na’ | ¿Se puede cambiar las letras de las canciones o no se pueden cambiar la letra de las canciones? ¿En qué quedamos, ‘OT’? Polémicas a un lado, la adaptación de ‘Ya No Quiero Ná’ le vino bien a Hugo, aunque la actuación no terminó siendo gran cosa. Él estuvo algo falto de actitud, para toda la chulería que un tema así necesita.
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