Billie Eilish acaba de ganar 6 Premios Grammy por ‘When We All Fall Asleep Where Do We Go’ y el disco va a pegar un subidón que podría devolverla al top3 americano esta semana. Pero la noticia que hoy nos ocupa está bastante alejada del terreno musical, porque lo que ha ocurrido es que la joven de 18 años ha perdido la paciencia con una Youtuber bastante absurda.
La muchacha en cuestión había subido varios vídeos a sus redes en los que se hacía pasar por Billie Eilish, pero el colmo de la historia llegó cuando se llevó a varias personas fingiendo ser sus guardas de seguridad a un centro comercial. Detrás de ella, o alrededor, una masa de gente enloquecida que pensó que estaba viendo a la Billie Eilish real. Gente que debía ser ciega, porque la peluca de la chica era un rato cutre, para ser honestos, y se parece a Eilish como un puerro a una patata, por mucha gafa gigante que se plante en la cara.
De modo que la Billie real ha hecho uso de su Instagram para enviarle el siguiente mensaje a la chicuela:
“Por favor, deja de hacer esta mierda. No es seguro para ti y es cruel para la gente que se lo cree. Me haces quedar mal. (…) Por cierto, es muy irrespestuoso hacerte pasar por mí llevando ESO 🤣.”
Claro, es que lleva razón en todos los puntos. En lo referente a la último, llevar ropa flúor fea no es ir vestida de Billie Eilish. En lo referente al segundo, sí, puede hacerle quedar mal. Si tú vas contando que te has encontrado con Billie Eilish y ha sido una borde, efectivamente le estás creando una mala fama que Dios sabe si debería tener realmente. Porque habrá quien luego no descubra que todo era un paripé, un “experimento” como dice ella.
Y respecto al primero, pues es el más obvio: claro que puede ser peligroso aparecer en un lugar con muchísima gente fingiendo ser famoso. Y además de peligroso es bastante absurdo, porque no hay quién se coma que lo haces por “crear contenido” o por “un experimento social”. Chica, eres Youtuber. Lo haces por el chuchu de saber qué siente una famosa entre fans. Lo que indica que no te vendría mal una sesión en un diván a cambio de 70 euros semanales. Y así poder superarlo.