Jose Álvaro de Balvin y Dos Ardillas lanzó un nuevo single hace unos días, y francamente, no hemos encontrado el momento de comentarlo porque llevamos tal retraso que cualquier día nos llaman para dar forma a la lista de Los40. ‘Mi Gente’, candidata para la próxima semana. Pero mola, lo nuevo de J Balvin mola: el artista ha publicado ‘Blanco’, un breve primer single que parece el anticipo de ‘Colores’, un álbum completo que vería la luz el próximo año.
Podéis escuchar este y otro puñado de hits en nuestro A-List de Spotify:
Como es marca de la casa, el rapero tira de beat hipnótico, controla a las mil maravillas el tempo y la métrica, se marca un estribillo rapeado sin mucha grandilocuencia pero repleto de hooks y deja unas ganas de salir a menear el cucu que vuelve a demostrar que, efectivamente, el reggaetón no es el enemigo.
Una de las fantasías de ‘Blanco’ ocurre hacia su segunda mitad, cuando José Álvaro de Balvin y Dos Ardillas suelta lo siguiente dejándonos unas potentes Ana Guerra vibes:
“Esto no es misa, pero vine de blanco,
hago solo éxitos a lo Benny Blanco.”
Así, blanquito. ‘Sayonara’ who, francamente. Podría haber sido mucho más Ana Guerra, con los siguientes ejemplos, por ejemplo:
“Esto no es misa, pero vine de blanco, soy diputado del PSOE a lo Pepe Blanco”
o
“Esto no es misa, pero vine de blanco, esta chaqueta no es del Breska es del Blanco”
Y no nos tiréis de la lengua porque no sabéis las sandeces que se nos han ocurrido al respecto. Y a pesar de -o gracias a- esa rima, sí, el tema sigue siendo un temón. También ayuda el locurote visual que Balvin se ha montado para la ocasión: en el vídeo de ‘Blanco’, el artista se muestra como antítesis de Ariana Grande y sueño dorado de Michael Jackson, con la piel con el mismo sanísimo tono que persiguió a Nicola Roberts toda la vida.
Y entre medias, calaveras, diablitos, rayos pintados, lágrimas doradas, coches, falta de gravedad y decorados dignos de un museo de arte moderno o un anuncio de Ford. No nos queda muy claro hacia qué tira más.