Nosotros votamos a Famous Oberogo como ganador de ‘OT’. Y eso que en la final, una victoria de Alba o de Natalia nos hubiera parecido igualmente fetén. Pero votamos a Famous. Y le votamos porque España estaba necesitada de una figura como la de Famous, con esos graves preciosos, esas posibilidades soul-pop de intérprete tipo timeless y su presencia en el escenario, capaz de ejecutar una coreografía. Un tío bailando en España, imagínate (sorry, Abraham, pero renunciaste a eso al volverte portorriqueño). Evidentemente, también tuvo peso el factor reality: Famous era tierno, simpático y bonachón. Un imán para el público de más de 50 y los que optamos por votar un poco más de inocencia, un poco menos de producto tallado para la industria.
Pero claro, la desventaja de su factor reality era que nos presentaba a Famous como alguien que tampoco es que fuese a ponerse delante de este o aquel productor o equipo a marcar unos límites demasiado claros. Iba a trabajar con lo que le dieran. Sacando lo mejor de sí y del producto, probablemente, pero con lo que le dieran.
Y claro, le han dado exactamente lo mismo de siempre. El concepto “Famous Oberogo” ha desaparecido porque el single es el mismo que tenían preparado para cualquier proyecto de serie Z de Pep’s Records o un ganador de ‘La Voz Kids’ que tenga más de 15 años. Lo único mínimamente reseñable de ‘Bulla’ son unos arreglos presuntamente africanos que aportan entre cero y nada al proyecto.
‘Bulla’ no representa en absoluto al Famous que nos mostraron en la Academia, ni el Famous que se presentó cuando pudo elegir canciones, ni delimita su perfil artístico de ningún modo. ¿Es un bop? Puede serlo, es lo que pretende. Pero es un proyecto de 15 minutos de vida. Porque el mercado está desbordado de singles así, con gente que se los cree más y los vende mejor.
Y seamos sinceros: todos sabemos que Famous no tenía las de ir a arrasar: su recopilatorio de canciones fue el menos vendido de entre los finalistas, y fue ganador del programa porque los contadores se pusieron a cero en el último tramo del show. Alba Reche iba ganando. Se ha hecho saber. Por tanto, es improbable que el proyecto de Famous funcione.
¿Y por qué contamos todo esto? Pues porque a sabiendas de que tiene las de no funcionar, ¿por qué demonios no se arriesgó con algo más representativo que fuera a dar que hablar algo más? Nos consta que había canciones mejores entre la selección final para el artista. Canciones con arreglos más soul-pop. Canciones que decían más de sus raíces.
‘Bulla’ es un producto absolutamente vacío. No es nada. Es una forma de quitarse a Famous de encima lo antes posible. Porque ya nos diréis cómo va a abrirse paso entre el otro centenar de canciones del estilo. Por dios, que le han puesto autotune a este señor.
Es otro ejemplo más de por qué ‘OT’ necesita cancelarse de inmediato si el sello, después, no va a tener el mínimo respeto por sus artistas.