Tercer single de Amaia y el primero desde que asumimos que no estábamos conectando con su proyecto. Y de repente, oye, se hace la luz al final del túnel y empezamos a entender algo con ‘Quedará En Nuestra Mente’. El rollito sixties, Marisol, con sus arreglos psicodélicos, su medio tiempo veraniego y fresquito… guay. Por fin una canción de Amaia con la que conseguimos entendernos, aunque sigamos viendo la letra un poco necesitada de auxilio. Menos que en las anteriores, eso sí: ahora no hay demasiada metáfora chunga ni versos con métrica forzosa.
‘Quedará En Nuestra Mente’ es el tercer adelanto del disco, ‘Pero No Pasa Nada’, que se pondrá a la venta el 20 de septiembre y que sigue siendo uno de los proyectos que más nos interesa escuchar de finales de año. ¿Qué paradójico todo, verdad? Así somos. Seguimos muy interesados en lo que Amaia vaya a ofertarnos aunque hasta ahora -justo hasta ahora, de hecho- nos haya dejado un tanto fríos. Gélidos hasta la llegada de ‘Quedará’, que entonces podemos decir que estamos fresquíbiris. En ello está el pusíbilis, ¿verdad?
Pero como siempre, tenemos una de cal y otra de arena: no entendemos el clip. Es decir, entenderlo lo entendemos, porque es sencillo. Amaia aparece en un programa que finge, no demasiado sutilmente, ser ‘OT’, y huye de él para ser libre en la naturaleza, aunque el final del clip nos vende que todo puede haber sido un ‘Los Serrano’ y reparece delante del micrófono, con el semblante de haber matado a una camada de gatos egipcios a base de colocarles un montón de pelucas encima hasta su asfixia. Calvofobia.
Lo que no entendemos es el objetivo de querer venderla como una persona triste ante las cámaras que necesitaba huir de ellas. Más que nada porque Amaia ha participado en dos talents, ofrecido entrevistas hasta a mi vecina del cuarto para la revista de la comunidad -un bodrio de número, por cierto, con Tere, la del segundo C, en portada-, y nunca la hemos visto tan triste como parece en el clip. Al final, da cierta impresión de que si por su equipo fuera, trataría de reescribir la historia para hacernos creer que la conocimos tocando en Las Ramblas, que es mucho más cool que La 1. Que por otro lado, cualquier cosa es más cool que La 1.