El marido de Kelly Clarkson no ha sido detenido. Tranquilizaos, que dejen de sonar las alarmas, dejad de insistir en el “¿veis? de soltera tenía hits más potentes” y dejad de suponer que veremos a Kelly subir las escaleras de algún juzgado, cual personaje de ‘House Of Cards’, en traje de chaqueta gris y con gafas de sol. No van por ahí los tiros.
La cuestión es que Kelly Clarkson va a ser la Ana Rosa americana por otra razón. No, tampoco a plagiado una novela de Danielle Steel y la ha titulado ‘Gall Flavour’, que os vienen siempre los mismos referentes de Ana Rosa a la cabeza. ¿Es que no vamos a recordar mejor aquella línea de cremas que lanzó bajo el nombre Esenciales AR? Aquello sí que era digno de mención.
Pero bueno, no estamos hablando de la reina de la prudencia informativa, sino de Kelly Clarkson, que va a ser su homóloga americana. Y es que según parece, la experiencia de la cantante en ‘The Voice’, y su simpática y espontánea forma de actuar ha provocado que NBC Universal Television esté interesada en grabar con ella un talk show. Es decir, siendo ella la presentadora, la Ellen Degeneres de nuevo milenio, la Eva Hache de trabajo no temporal, la Patricia Gaztañaga más allá del testimonio.
Aún no se conoce demasiado del proyecto, ni si el programa será parte de NBC o la productora se la venderá a otras cadenas. Lo único que se sabe es que Kelly seguirá en negociaciones, y no le viene mal: después del batacazo comercial de su último álbum, el apoyo televisivo podría ser un importante punto en lo que será su carrera en el futuro.