Mala Rodríguez está de vuelta con un nuevo single y vídeo. Es una estupenda noticia, especialmente porque la artista parece haber renunciado ya a su vertiente, digamos, más pop, y ha vuelta a sus raíces urbanas en ‘Gitanas’, aunque ya había dejado caer algunas perlitas anteriormente, como ‘Mátale’, que por algún motivo no está disponible en Spotify.
La historia es que en aquella canción, por ejemplo, Mala aprovechaba los sonidos oscuros, más cercanos al trap, vestidos con poco adorno y se lucía de pleno, a diferencia de en ‘Gitanas’, donde termina totalmente embestida por una sobreproducción que termina resultando incluso incómoda a ratos.
Y es que en el single de Mala el estribillo pasa de gancho a tortura cuando, por haber, hay hasta algún beat Bollywoodiense que hay que intuir entre tanto ruido que lo envuelve. Y de mientras, claro, ella tratando de dejar paso a algún tipo de melodía o hook vocal. Digamos que es una estrategia un tanto M.I.A., sólo que en su caso, bien por experiencia o por gusto, este tipo de movimientos ruidosos terminan dejando un mejor sabor de boca.
‘Gitanas’ es una canción donde menos, hubiera sido más, porque sí, Mala Rodríguez sigue siendo demostrando tener una potencia que las nuevas generaciones aún no alcanzan, sigue controlando la habilidad de hacer de lo patrio un arte sin caer en la caspa, y sigue, casi 20 años después de su debut, teniendo una frescura necesaria para la industria musical del país.
Simplemente, necesita dejarse de inventos, ponerse delante de la música, y no dejar que el mensaje, más que importante en el caso de ‘Gitanas’, se diluya entre tanto fuego de artificio.