La suerte no ha estado muy a favor de Ne-Yo desde que la era streaming arrancó y dejó un poco de lado el mercado digital y las ventas tradicionales. En los últimos cuatro años, el cantante ha puesto a la venta 5 singles y ninguno de ellos ha conseguido hacerse un hueco en el top100 americano, siendo sus escuchas en Spotify, además, un importante cuadro que rondan los 3 millones raspados. Cuando los rondan.
Y eso que Ne-Yo, que parece no haber tenido un hit desde que un señor pintara un alce con una mezcla de sangre y carbón en una cueva de Altamira, sí fue capaz de marcarse algún momentum en el mercado americano cuando la gente compraba más canciones: fue #6 en 2012 con ‘Let Me Love You’, #19 en 2014 con ‘She Knows’, y su colaboración con Pitbull -en paz descanse- ese mismo año lo llevó hasta el #9. Pero desde entonces, radio silence.
Así que el muchacho espera romper la tendencia con ‘Push Back’, y no ha escatimado en features: se acompaña de una Bebe Rexha en plena racha gracias a ‘Meant To Be’ y de una Stefflon Don que aparece hasta debajo de tu BigMac como te despistes. De momento, la veraniega colaboración acumula casi 2 millones de escuchas, con lo que algo ha debido hacer Ne-Yo mejor.
Para seguir exprimiéndola, ha publicado ahora el clip oficial del tema, que no tiene la inversión de ‘Avatar’, desde luego, pero se maneja bien con cuatro palés y tres texturas como de periódico, simulando a ratos el ‘Rude Boy’ que salvó la era ‘Rated R‘ de Rihanna hará unos 10 años. Mucha coreografía, mucho sombrero marca de la casa, y mucha superposición para hacer que el decorado, más simplón que la canción en sí, tenga el mínimo tirón. Ne-Yo ha ido a lo fácil, pero puede ser una apuesta segura para el verano si las radios le muestran el mínimo apoyo.