Pobre Pharrell Williams, él que volvía feliz con N.E.R.D. para presentar un nuevo trabajo, y que todo apuntaba a que las cosas irían rodadas después de años de silencio, se presenta con ‘Lemon’, junto a Rihanna, y lejos de ser un gran hit para la banda de productores, supone un resbalón que apenas ha funcionado como Disco De Oro en Australia.
Eso sí, es el único single histórico de N.E.R.D. con una entrada en Billboard, con lo que, cantito en los dientes. La suerte del álbum, eso sí, ha sido mucho peor: apenas un mes después de su publicación, se mueve fuera del top80 de Billboard y da pocas señales de poder remontar a nivel comercial. Al menos, pueden contentarse con estar gustando más a la crítica, con el 7,5 que el álbum promedia en Metacritic.
El caso es que uno de los más importantes boosts para ‘No_One Ever Really Dies’ puede llegar en unas semanas, cuando la banda tome el intermedio de la Super Bowl para pobres: el del NBA All Star Game, como ya hicieron figuras como John Legend o Sting años anteriores. No, en serio, imaginad a Sting tratando de levantar los ánimos en un intermedio. La gente corriendo hacia las barras a pedir bocatas. Y pidiendo que les hagan más el bacon con tal de volver más tarde a sus asientos. Bien crujiente.
El 18 de febrero, por tanto, veremos el efecto que el intermedio de la NBA tiene en el álbum, si hace que remonte el single, y si Rihanna decide reaparecer para poner la voz en ‘Lemon’, o en su defecto, contratan a la muchacha de turno para que haga las veces de Rihanna y todo resulta aún más para pobres.
