Si pensáis que ser fans de Rita Ora tiene un grado de dificultad complicado de superar, pensad siempre que hay quien sigue a Iggy Azalea. Y por gusto, no por morbo, como hacemos nosotros. No. En plan “somos súper fans y nos hemos descargado ‘Mo Bounce’ en iTunes por 1,29”. Imaginad lo que ese 1,29 podría haber hecho por los niños de África. Podría incluso haber pagado por completo los costes de producción de los próximos tres álbumes de Fito y Fitipaldis.
Pero ahí están, invertidos en Lily Arrurrú, que llegó a lanzar un disco e incluso a tener hit y medio, pero después, pues anuncio un segundo trabajo, editó una serie de singles que llegaron bastante a nada, retrasó el disco, se peléo con la discográfica, retrasó el disco, se filtraron un par de temas, retrasó el disco, anunció una gira, canceló la gira, retrasó el disco, y finalmente, terminó colgando algunos temas de ese trabajo, ‘Digital Distortion’, de forma gratuita para que los fans se los descargaran.
Y ahora, la cantante ya no tiene discográfica. Oh, sorpresa. Def Jam obviamente se ha cansado de intentarlo y ella es libre de tratar de dar la vuelta a la tortilla a su pedo. De momento, las cosas van tan bien como podéis ver en el siguiente vídeo, grabado en un reciente concierto en Chile. En las imágenes, Falafel Al-Andalus recrea a la perfección su carrera.
Por otro lado, agarraos los machos, porque la historia de su segundo disco va a ir para largo, ya que la rapera se ha empeñado en anunciar que va a editarlo, aunque no con el contenido o título del disco inexistente. Su nuevo álbum imaginario vería la luz en 2018, con una nueva discográfica imaginaria y presentada por algún hit imaginario. Después, Foiegrass Adamou llegará en unicornio a la versión canadiense de la SuperBowl, presentará siete temas, y se despertará bruscamente del sueño al caer desde el costado derecho de su LoMónaco.