¿Recordáis ‘FlashForward’, aquella serie americana que debía pillar el testigo de ‘Lost’ y que realmente como mucho pilló un hongo en su edición en DVD? Pues en su capítulo piloto, la sociedad americana caía desplomada en las calles y se montaba un Cristo de no te menees. Un poco lo que ha vuelto a ocurrir en la costa oeste americana después de que Lorde se haya pasado por el show de James Corden. La cantante neo-zelandesa ha ido a presentar uno de los temas de ‘Solar Power’, ‘California’, que tiene el mismo poder del resto de cortes del álbum: el de una profunda, profunda somnolencia.
Dicen, de hecho, que después de su paso por el ‘Late Late Show’, las farmacéuticas americanas anunciaron la quiebra de NyQuil y que Dormidina ya ha amenazado con presentarse en los juzgados para denunciar competencia desleal. Hemos hablado con una de sus pastillas de 12,5 mg y esto es lo que nos ha podido confirmar al respecto:
«Zzzzzz…. zzzz…. zzzzz.»
Se conoce que también ha escuchado ‘Solar Power’. Y no será porque Lorde no haya intentado colar el lanzamiento con todo el buen rollo playero posible: en su performance de ‘California’ se monta un Mirela, con sus sueños al aire, sus miedo al mar, y un montón de arena colándosele en las chancletas mientras actúa. Mucha playa alrededor, mucha brisa de esperanza y mucho zapatito nuevo de tacón, pero poca chicha.
Y eso que ‘California’ es de los tracks que más huella dejan en el álbum. Pero entre el rictus de ella de haber ingerido varias docenas de hongos alucinógenos, el look de Nicole Kidman en ‘Nine Perfect Strangers’ y los beats de estar tirado en una hamaca, la única forma de conseguir conectar con todo esto es tener el dinero suficiente para ir a las Bahamas a un todo incluido. O tener una casa en Lanzarote en mitad del Parque del Timanfaya. El volcán, no Silvia. Esa era Fominaya.
